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ReBAMB: 40 años al servicio de la academia

UCR UCR

23/Octubre/2015

Más de 300 investigaciones nacionales e internacionales, descubrimientos de nuevas especies y un sinnúmero de actividades docentes es lo que ha generado la Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes (ReBAMB) en sus cuarenta años de existencia.

Durante todo este año 2015 se realizaron una serie de actividades para celebrar el cuarenta aniversario de esta área protegida, actividades que mostraron los logros alcanzados y el potencial de esta reserva en materia de conservación, docencia e investigación.

En las jornadas de investigación, realizadas recientemente, se presentaron una serie de ponencias sobre investigaciones vigentes en la ReBAMB, en temas tan variados como especies de aves, hidrología, rutas turísticas en zona de influencia, clima, administración compartida, fenología de especies de árboles,  fenología del sotobosque, entre otras

Según la directora de la ReBABM, M.Sc. Liz Brenes Cambronero, las investigaciones presentadas son de proyectos muy recientes “logramos una buena muestra de las investigaciones con tesis de maestría, de estudiantes de Gestión de los Recursos Naturales, de la Escuela de Geografía, de la Escuela de Física, de Biología y de Artes con base en los calendarios que se han llevado a cabo para dar a conocer las especies existentes”.

Además del trabajo que se ha llevado a cabo en investigación y docencia, durante esta celebración se valoró las actividades de educación biológica emprendidas por el Trabajo Comunal Universitario “Educación ambiental en el área de influencia de la ReBAMB”, un proyecto que inició hace cinco años con el fin, según Brenes, “de contribuir de forma significativa para que las comunidades cercanas conozcan la reserva y se identifiquen con los procesos de conservación”.

Para Brenes el trabajo realizado por todas las personas que han dirigido esta área protegida ha sido de gran valor. Destacó que como nueva directora de la ReBAMB continuará con una serie de proyectos valiosos que se han venido implementando y trabajará para mejorar las condiciones de la estación biológica “quisiera que la estación tenga mayor potencial para apoyar las labores de docencia e investigación”. 

Brenes plantea que se hace necesario contar con instalaciones para el personal administrativo, desarrollar señalética para los senderos, diseñar una página web y luchar por las garantías laborales de las personas que trabajan en la estación.

Aseguró que la Universidad de Costa Rica “tiene la obligación de volcar sus ojos hacia la reserva y potenciar los recursos que tenemos”, debido a todo el potencial en materia de conservación, docencia e investigación y a los aportes que se han dado en estos cuarenta años.

Objetivos cumplidos

Según Brenes desde la creación de la reserva siempre se tuvo muy claro el objetivo que debía cumplir esta área de conservación.

Señala que la historia de la ReBAMB es muy diferente a lo que ha pasado con otras áreas protegidas y se remonta a la historia misma de la creación de la Sede.

“Para nosotros tiene mucho significado. La reserva nace como un esfuerzo comunal, cuando el comité pro UCR en San Ramón pensó que  era necesario contar con un terreno boscoso para desarrollar carreras como biología, geología, geografía, topografía y otras más”.

Es así como buscaron el terreno con este fin  “eran tierras baldías, y ellos visualizaron que ese terreno que estaba allí debería ser una reserva para que la universidad desarrollara carreras, imagínese la visión de esas personas”.

De esta forma, según Brenes, se está cumpliendo el objetivo perseguido por estas personas visionarias, ya que durante todo este tiempo estas tierras han sido aprovechadas por estudiantes, profesores e investigadores de la UCR y de otros centros educativos nacionales e internacionales.

Actualmente la reserva está administrada en conjunto con el Ministerio de Ambiente y Energía y con la Municipalidad de San Ramón. Cada una de estas instituciones, desde sus funciones, aportan al fortalecimiento y crecimiento de está área protegida dedicada a la academia y a la conservación y protección de importantes recursos naturales que beneficiarán a las  futuras generaciones.

GRETTEL ROJAS VáSQUEZ
Periodista, Sede de Occidente